lunes, 30 de marzo de 2015

Amargo amor



Dame un abismo,
bello cadáver.
Albérgame.
Este es tu anillo:
mi odio.
Este es mi pacto:
tu cuerpo por  mi sangre. 
Te quise nunca,
sombra me amaste siempre,
hueso de despedidas,
amarillenta latitud de lágrima.

Alcemos al cielo esta locura.
Amargamente brindemos, odiado amor,
brindemos.
Toma  mi copa y bébeme la vida 
que se me fuga a lomos de versos 
nunca escritos.
Yo te entrego, Poema, las falanges que duelen 
de golpearse a diario
contra la escarcha de los verbos trágicos,
esta rutina mía de pequeños suicidios,
mis inútiles ansias
de no amarte. 




1 comentario:

  1. Me gusta mucho tu poema, Rosa, siento la tensión, la lucha que se convierten en versos que impactan por su fuerza y anotamos a pie del poema.

    Yo te entrego, Poema, las falanges que duelen
    de golpearse a diario
    contra la escarcha de los verbos trágicos,

    Un abrazo.

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