sábado, 28 de diciembre de 2013

Garganta de luz



Silencio, háblame.

Ahora
que la piel del tambor
cesó de percutir un desierto
en la aurora.

Háblame
desde el magma
florecido en cada milímetro de nieve,
en cada renglón de tiempo coagulado
que amasa mi canto
malherido.

Háblame
con la voz que profana los espasmos del aire.

Díme de mí.
Escarba mi Nombre
entre la médula espinal de las estrellas.
Pregunta a los pájaros
dónde olvidé el paracaídas
de mis sueños.

El ser que usurpó mi voz
me desconoce
cuando cruzamos nuestra mirada en las aceras del día.

Devuélme mi nombre,
ese nacido bajo todas las cruces,
gestado
bajo una conjunción de espinas y violetas,
crecido en las praderas del viento,
incendiado de alondras y de enigmas.

Dame tu lengua
para alumbrar estas pupilas de lluvia
y madurar en garganta de luz
la sinfonía subterránea de mi sangre.






martes, 24 de diciembre de 2013

Peón






Avanza...
Un paso más,
solo un paso más
por el ajedrezado palacio del destino.

En alto
una espada de azufre.
En alto
una bandera mutilada.

Ciérrale el paso al alfil de la Noche.
Sube a las altas torres
para otear el rastro
de la hoz del silencio.

Guárdate de la reina blanca que murmura
tu nombre en el color de la ceniza.

Apura
un último sueño de marfil
y duerme... duerme.

Pronto serás abono de esperanza
y los cuervos del aire
merodearan en torno al radiactivo esqueleto 

de tu fe.

Pronto, muy pronto
serás bautizado
por su mano
como semilla y piel del sacrificio.



domingo, 22 de diciembre de 2013

Hilos




Abre tus labios al silencio.
SIENTE...
Deja que arda el abismo que precipita el vértigo.

Envuélvete
En la luz de fuego que te nombra.

La araña del destino
Tejió los hilos de tu nombre
en mi boca.

Hemos desprecintado
El huso que nos ata a la espina dorsal
d un dios de barro.
Hemos robado al tiempo
sus semillas de pájaro
para volar por encima de las horas truncadas.


Siente
Cómo la noche se hace lumbre y ceniza
Cómo siembra preguntas
Cómo dispara al aire cien arcanas palabras.
Cómo se abre la tierra de mi cuerpo en tus manos
para beberse todos los rios subterráneos

Cómo un mismo misterio nos condena y nos funde
en el crisol de una campana lúcida
que repica sobre las sábanas del alba.

domingo, 15 de diciembre de 2013

La jerarquía de las flores del aire




Pintor
¿qué sienten las yemas de tus ojos 
cuando palpan la luz intransitiva?
¿Cómo se puede traducir el alma de una rosa, 

esparcir su simiente sobre un espejo blanco 
cuando palidece la luz de la materia?
 No se ha inventado  todavía el lienzo 

que descifre la piel del terciopelo, 
ni las corolas del temblor,  
ni el ámbar que subyace 
bajo la altiva capa de sus pétalos.
 

Intentas forjar una cruz de fuego, apellidarla, 
modelarla en el vientre de una abstracción, 
adjudicarle una estrella a sus costados. 
Todo es en vano:
el lirio ha roto sus blancos huesos 
en el intento de sembrarse en tus pupilas. 
Han procreado en el corazón del jacinto cien orugas 
en el breve trayecto del silencio.  

Sí, las flores del aire 
danzan en coro alrededor de tu mente.
Han inventado para ti 
una nueva oda en los charcos del arco-iris, 
y tú las arrancas de sí,  enmarañas su calma, 
estratificas el perfil de su belleza, 
su pedigrí cromático... 
Aislas una para hacerla inmortal 
ante el horizonte de una mirada. 

Pero su esencia es hidromiel 
de un paraíso jamás imaginado.

lunes, 9 de diciembre de 2013

Sinapsis







Cuántos lingotes de tormenta
cuantos verbos de azúcar
cuántas cuerdas
equidistantes del llanto,
de la música
se han quebrado
de un año luz a otro del silencio.

Cuántas lenguas suicidas
han hecho naufragar a las sirenas del aire
en el haz de un pensamiento vagabundo.

Y cómo invertir el polo eléctrico
de un sueño todavía adolescente,
cómo adoctrinar sus intestinos de alondra,
cómo tatuarle la máscara de la sensatez
en su cerebro roto
para que no conspire contra la milicia
de los austeros relojes del destino.

jueves, 5 de diciembre de 2013

Azimut







Saberme equidistante a los espejos cóncavos del cielo,
sentir su lengua látigo tirando de mis brazos, 

de mis vendas abiertas,
de mi sangre semicoagulada 

en los agujeros negros de la vida.
Sentarse
sobre la tumba del viento,
tragar todos sus pájaros de arena
y regresar a la hora del baño de los faunos
con los bolsillos repletos de libélulas,
un ángulo de tierra,  un ángulo de música
y un poema imposible tejiendo  la mirada.
Mesarse las pupilas y preñarlas de luna,
curvar la Noche fría
bajo la piel del agua, fundirla entre sus labios,
¡que tiemble!  ¡que refracte su corazón de uña!
¡que arda
sobre la boca etérea de los astros!





(Azimut: Es el ángulo en grados, medido hacia el este desde el norte o hacia el oeste desde el sur, de la proyeccion de un cuerpo celeste sobre el horizonte).