lunes, 23 de abril de 2018

El lanzador de nubes













Ayer fue sábado casi toda la noche,
como todas las noches de martes que se nutren
de semilla de sábados;
como todos los inviernos en que el reloj
pronuncia
horas de terciopelo
para acallar el frío,
vino a segar mis sombras
el lanzador de nubes.

Una vez más,
el gorrión de sus ojos
acabó picoteando
mi voluntad de espuma.
Y el grillo de una vieja promesa
se enredó entre mi lengua
y me colé en sus huesos
y se enterró en mi carne...

A veces
no me encuentra:
mi voluntad se esfuma
en el agujero negro de algún lunes
marchito,
o se hunde
en los cajones
grises de la memoria,
o en el quicio severo
de opacas despedidas.

Él me busca en los besos
a tientas
Y yo,
como todas las noches
en que se plantan sábados,
como todos los martes
destinados
a exorcizar demonios
a golpe de caricia,
le doy un puntapié
a la melancolía
y hablo una lengua roja
con mis labios en llamas.


Hoy es domingo. Llueve.
Hoy mis pájaros tristes
picotean sin piedad
el silencio.

Pero sé que él me espera
a la esquina
de un verso rojialado,
esparciendo mi nombre
en la próxima playa de un martes
con sabor a canela.





domingo, 1 de abril de 2018

Los ojos del eclipse



Un mar de cenagosa espuma nos vencía
en un pulso diario;
habitaban su líquido vientre diminutas arañas
en cuya tela
se iba gestando un animal
oscuro.

Sus vísceras contenían un eclipse.

Podía presentirlo
tras la aparente calma de los gestos.
Acechante, maligno,
en el amargo rictus
de los labios.

Un día lo enfrentamos.
Desnudamos sus terribles pupilas
y cayó fulminado
por la luz de una farola
de preguntas.
Y al fin,
amanecimos

Pero si un día
el filo de una espuma siniestra hierese el verso incierto
del mañana,
recuerda
que fuimos capaces de fundir un mar de aciaga
espuma;
que pirateamos la melancolía
navegando sobre cien mil olvidos,
silenciando alguna que otra muerte
con cantos azules
de sirena.

No olvides
que el animal anda al acecho,
agazapado en la debilidad de una renuncia;
que solamente
el cigarrillo del temor
se consume
describiendo los ojos
del eclipse.