La nuit
Madame
la nuit
abisal
ignota
fértil
oceánica
La noche
contorsionando los cuerpos al compás
de un eléctrico zumbido
pellizcando
el letargo del animal oscuro
serpeteante
en aceras de espuma y cócteles de fuego
País
para frágiles espigas
para tallos maduros con raíces picadas
por la viruela
de la soledad.
Nunca me perteneció
como a ti
nunca logré saborear al máximo
su enfervorecida pulpa
La noche fugaz
su meloso veneno con el que inocularse un espejismo
en compañía
¿Recuerdas
el saxo que devoraba el tiempo con su boca
metálica y hambrienta?...
No he conseguido apartarme
en todos estos años
de aquél rincón
al que seguro acudirás un día
impuntual
vibrante
disparando
una mala excusa
con un cigarro rubio consumiéndose
al ritmo de mi nostalgia
entre tus dedos.